Tener una vida rutinaria suena como algo aburrido. Las rutinas nos dan una base desde la cual podemos partir para hacer que nuestros días sean productivos y variados.
Rutina
Nuestras rutinas son las cosas que hacemos casi en automático. Las rutinas son los hábitos que hemos adaptado fuertemente a nuestra vida. Reflexiona en tu día a día y las cosas que se repiten. ¿Cómo son tus mañanas? ¿Qué haces normalmente en tu día a día? ¿Cómo terminas tu día?
Respondiendo estas preguntas podrás darte cuenta de los hábitos que tienes, buenos o malos son parte de tu rutina actual.
Incorporar hábitos
Al definir tu rutina ideal no es necesario forzarte a hacerla, aquí te doy unos tips para poco a poco ir incorporando tus nuevos hábitos y dar espacio para experimentar en tu día a día.
Paso 1. Escribe tu rutina actual
Es importante que tomes nota de tu rutina actual. Toma nota de las actividades que se repiten en tu día a día o semana.
Ejemplo:
Paso 2. Define tus nuevos hábitos
Escribe una lista de hábitos que te gustaría tener, estos deben ir enfocados obviamente a cómo te gustaría vivir en tu vida ideal. Por ejemplo, si en tu vida ideal haces arte, asegúrate de escribir un hábito que sea con enfoque en tu lado creativo.
Ser flexible te ayudará a hacer fácil el proceso. Por ejemplo, si un hábito que quieres es meditar todos los días pero un día no te sientes con la disposición, puedes intercambiarlo por escribir tus pensamientos en un diario, igualmente será un espacio que utilices para conectar contigo pero de manera diferente.
Ejemplo:
Paso 3. Haz tu nueva rutina
Al tener la lista de hábitos, vamos a incorporarlos en ciertos días de la semana, entre más cómodo se te vaya haciendo el hábito puedes ir aumentando su frecuencia hasta que se vuelva algo natural en ti.
Ejemplo:
Adapta y mejora
Date la libertad de hacer tu nueva rutina como te parezca mejor, por ejemplo si tu prioridad es el ejercicio no tiene nada de malo repetirlo más días, siempre y cuando guardes aunque sea un pequeño espacio para lo demás.
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Conseguir una vida balanceada no se trata de ser estricto contigo y cumplir al 100 con cada aspecto de tu vida. El verdadero balance está en dedicarle aunque sea un poco de tiempo pero no dejar de darle atención a eso que te importa.
Confía en el proceso y adapta tus días cada vez que necesites. Lo importante aquí es que no perder el enfoque de las áreas de vida que te importan.
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